Ayer se reunieron en Barcelona investigadores clínicos de toda España, hospitales, autoridades sanitarias y representantes de compañías farmacéuticas, biotecnológicas y de tecnología sanitaria, entre otros, para debatir sobre el uso de la impresión en 3D en el campo de la salud. La jornada, organizada por la Plataforma Española de Nanomedicina (NANOMED Spain), coordinada por el IBEC; la Plataforma Española de Innovación en Tecnología Sanitaria, coordinada por el FENIN, y el HealtTech Clúster, se articuló en 3 mesas redondas donde se debatió sobre la situación actual, las perspectivas futuras y los retos que representa la impresion en 3D en sus aplicaciones en salud.
En la inauguración, Ángel Lanuza, coordinador de la Plataforma Española de Innovación en Tecnología Sanitaria indicó que: “Esta tecnología ofrece un futuro prometedor, por tanto, es muy importante que los diversos agentes del entorno sanitario sigamos colaborando juntos para dar respuestas a los retos que la sociedad propone, trasladar la innovación al mercado y aumentar la competitividad de nuestras empresas”.
En el primer debate, que giró en torno a la Impresión 3D en la práctica clínica, se puso especial hincapié en las tecnologías que ya están implantadas a día de hoy, como la creación de bioréplicas para el estudio quirúrgico (BREQ) que presentó Jesús Corbacho de la empresa Eureqa, y donde destacó la relevancia de ocuparse de todo el proceso de fabricación a partir de las imágenes del historial clínico del paciente, proporcionando al cirujano un modelo para planificar la cirugía y un modelo esterilizado para el trasplante. En este primer debate también participó Damjan Kolevski (Regemat3D), Albert Giralt (Avinent) y Carlos Atienza (IBV), donde también se destacó la necesidad de una normativa regulatoria que garantizase la seguridad de los productos fabricados.
En la segunda mesa redonda se abordó el tema de la medicina regenerativa y los avances en bioimpresión 3D con células, cuya potencialidad en regeneración de tejidos y órganos aún está en vías de desarrollo. La Dra. Elisabeth Engel (responsable del grupo de Biomateriales para terapias regenerativas en el IBEC) explicó los retos a los que se enfrentan, ya que el tejido, debido a su complejidad, es muy difícil de mimetizar, pero la impresora en 3D ofrece la posibilidad de crear estructuras en 3D muy porosas con biotintas, que permiten hacer llegar oxígeno y nutrientes que garanticen la supervivencia celular. En la misma sesión, el Dr. Roberto Velez (Hospital Vall d’Hebrón), el Dr. Pablo Gelber (Hospital de la Santa Creu i Sant Pau) y Esteve Trías (Banc de Sant i Teixits) hablaron de las necesidades en la práctica de su profesión y que esta nueva tecnología puede cubrir .
En la última sesión de la mañana, retos y futuro, protagonizada por Xavier Canals (TecnoMed Ingenieros), Tomas Megia (Acció – HUB3D) y Angel Lanuza (Fenin), los ponentes presentaron y debatieron la regulación del uso de la impresión 3D en el ámbito de la salud, así como los dilemas éticos que la misma presenta, y la necesidad de programas de formación. También se trató del modelo de desarrollo tecnológico CPI (Compra Pública Innovadora), en que las administraciones públicas participan de la financiación de nuevas tecnologías con finalidades médicas y del ámbito de la salud, y también sobre el Global 3D Printing Hub, que se instalará en Cataluña.